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Por embriología el testículo crece en pelvis y luego va aproximándose al escroto (bolsa testicular), pasando por la región inguinal al séptimo mes de gestación y ubicándose en fondo de bolsa antes del parto. Cuando queda detenido su descenso en pelvis o en zona inguinal o sin llegar al fondo de la bolsa, se lo llama TESTICULO NO DESCENDIDO o TESTICULO ECTOPICO. Las causas de esta detención no siempre se conocen. El TESTICULO debe estar en su bolsa para contar con una buena fijación a ella y no quedar "suelto" en una posición no debida, por el riesgo de girar rápidamente y torcerse siguiendo el eje de sus arterias, perdiendo su irrigación y vitalidad. Otra razón para lograr buena posición testicular es la temperatura en la cual debe madurar. En bolsa es de 35* Cº y su serie espermática se desarrolla plenamente; en una "localización alta" la temperatura es de 37* Cº perjudicando su crecimiento y la maduración de las células espermáticas. Aquí comienza el tratamiento médico con la aplicación de un inductor hormonal, para intentar el descenso y para elevar de este modo la hormona masculina propia del niño y ejercer el efecto de ubicarlo en el fondo de la bolsa. De no llegar a la posición deseada se recurre a la cirugía para quitar el tejido interpuesto entre el testículo y bolsa. Importa mucho el modo de fijarlo a bolsa, dejándolo en un primer paso libre de los tejidos vecinos que lo sujetaban en mala posición y, en un segundo paso, ubicarlo en una fracción especial de las capas que conforman la bolsa, para rodearlo con ellas y dejarlo definitivamente allí. Con esta conducta evitamos su deslizamiento hacia la "posición alta inicial" por "no fijarlo" entre las capas, que la bolsa puede darle, para continuar con su crecimiento. |
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